Mujer Lunar, sagrado femenino
Mujer Lunar, lo sagrado femenino
Mujer Lunar
Ancestralmente se sabe que la naturaleza de nuestro útero, la luna y la madre tierra son las mismas, son cíclicas.
Si una Mujer hace conciencia de este conocimiento, es suficiente para tener acceso a un poder ilimitado. No es para dominar al mundo, es el poder para ser soberana de ella misma. Me refiero al poder para gestar y parir su propia realidad, porque amorosa acepta el flujo natural de su ciclo.
El día que cada Mujer comprenda desde su #corazón esta sabiduría, comenzará a ser paciente y amorosa con ella misma 💙 Porque la #naturaleza nunca se equivoca, ser Mujer es la forma 💯 humana, en que los ciclos de la vida se evidencian.
¿Por qué en el ciclo menstrual radica nuestro poder?
Los ciclos universales son el ritmo de la vida misma. Todo en el Universo tiene ciclos y todos son sagrados.
Cada vez escucho más decir a mis mujeres cercanas “estoy con mi luna”, me encanta que al fin así lo comuniquen. Así es usado por mujeres conocedoras de los saberes ancestrales, que asocian el ciclo menstrual con el lunar. Cada vez compartimos más el poder transformador del ciclo y lo que surge cada mes de lo emocional, desde lo más profundo.
Me ha gustado también compartir este sentir con hombres, son temas que no se hablan mucho y es tratado por nosotras las mujeres como algo de lo que no se debe hablar, eso nos enseñaron, como si fuese algo demasiado íntimo y a puertas cerradas, cuando es lo más natural y propio de “ser mujer”.
Cito frases que he escuchado;
“Es que esos días me paralizo, me voy para adentro”, “no veo a nadie”, “espero que pase no más”, “tomo pastillas para que pase” “no quiero que me vean” “ando super fea, hinchada” Creo que parte del dolor cada una lo crea y lo dimensiona según el grado o nivel de emocionalidad en que estamos, lo mismo con la sensación física de los días de “la luna”, muchas veces nos sentimos horribles pero no es lo que otros perciben.
Hay que mirar bien y ver que el mundo lo entiende y comprende pero siempre que se converse, y ahí está el tema, lo regular es esconderse y no manifestarse como algo tan parte de la vida, es que nacen los misterios frene al estar con “la luna” y los chistes o burlas a veces muy mal entendidas y otras veces mal intencionados, en base al final al desconocimiento y a lo común de la mujer de “irse a su cueva” esos días, en vez de mostrarse quién es y cómo se siente realmente en eso días, así literal, como viene la sensación, como viene el flujo, eso para mí es muy lindo, y muy revelador.
Vivir consciente del ciclo
Es tan lindo vivir consciente del ciclo y cada una de sus fases, aunque a veces no me sienta en un 100% de energía, y sienta el movimiento permanente la sangre y su calor, es rico desafiarse esos días y salir a la vida al encuentro del hacer, al ritmo que sea necesario.
Cuando comparto vivencias de mi modo de vivir mi luna, me ha sorprendido de que muchas mujeres rechazan su propio fluir, su sangre, algo que quieren ver que se acabe y que dure lo menos posible.
Y como todo es un proceso de aprendizaje y conocimiento, hablando de algo personal, hace muchos años usé el dispositivo #mirena, método anticonceptivo que ya hace años está muy de moda. Recuerdo que el doc me dijo que fui una de las primeras personas en Chile en usarlo.
Relación con mi luna
Me pasó algo muy fuerte, en relación a mi luna, el ciclo casi desapareció dando paso a lo que prometía; la “libertad” en cuanto al sangrado pero nadie me advirtió la desconexión que iba a experimentar con mi cuerpo. Fue un año rarísimo ahora que miro hacia atrás, antes del año decidí sacarlo y volverme a mí. Lo comento por que ha sido parte de mi camino de conocimiento.
He aprendido de mi luna, a respetarme a ir más lento esos días en todo sentido, en las comidas, en las conversaciones, en con quienes comparto y lo que comparto, son días de harta conexión para mí, de ir a temas profundos. Soñar mucho, de manifestar algo que nace, en este punto la mayoría de las mujeres tienen su ciclo en la luna nueva, en el nuevo comienzo.
La luna tiene una influencia significativa en nosotras, al permanecer en conexión estaremos más conscientes de nuestras emociones, sentimientos, pensamientos y conductas.
En general conversando con otras y con mi vivir lunar, te dejo un par de consejos muy simples y prácticos
- Trabajar con tu respiración para bajar los dolores de cabeza, vamos oxigenando más el cuerpo y así la cabeza empieza a liberarse, te sienta en medio loto o loto completo, tomas con tus dedos pulgares tus dedos índice y dedicas al menos 5 minutos al ejercicio de respiración. Luego inhalas en 8 exhalas en 8, lo vas repitiendo en el día todas las veces que lo necesites.
- Descansar si estás muy removida, si las aguas están muy movidas siéntelas, abraza con tus manos una sobre la otra la zona inflamada o sensible, genera calor entre tus manos y lleva una mano sobre la otra. También son muy agradables los guateros de semillas si es mucha la molestia.
- Tomar agua toda la que sientas necesaria, asi la sangre también se hace más liquida, y se mueve más libre.
- No dejar de hacer tu vida, es que puedes incorporar tu luna al ritmo del día con una frecuencia especial y sintiéndote.
- Para entender más y conectar los ciclos naturales de la naturaleza con los internos, puedes anotar cómo te sientes en los días de tu luna, y en resto de las fases también, para así poder ver de forma mucho más clara los cambios y usar esa información como una forma de cuidado y de conexión con la naturaleza cíclica.
- Y para enraizar y conectar tu ciclo a la tierra y a la naturaleza es regar tus plantitas con tu sangre, tu sangre contiene tres de los micro nutrientes primarios de las plantas. Nitrógeno, que se usa para producir hojas y mantener un buen color verde. Fósforo, que ayuda a formar nuevas raíces y producir semillas, frutos y flores y finalmente. Potasio, que desarrolla tallos fuertes. Pon tu sangre en tu jarrito especial para esto, diluida en agua: el abono natural más efectivo para cuidar tus plantas.
Esos días
Me encantan esos días y lo que siento al estar en movimiento y como resuelvo el llevar la luna en el día a día, en mi caso ocupo toallita del tela lavables (recibe tu luna) y calzones menstruales. No me gusta la copita, super personal pero me siento invadida nunca me acomodó, y menos las toallitas desechables que destinaré otro espacio en el blog para profundizar en el daño que generan.
Mi sistema desafía su uso cuando salgo de la casa, pero no hay nada en ese sentido que sea imposible de solucionar, en los casos que salgo y me toca la luna nueva, me dispongo para tener que estar dónde sea con mi sistema.
¿Cuál es la relación entre la menstruación y la luna? ¿Cómo puedo conectar con los ciclos naturales a través de la menstruación?
Ancestralmente se asocia el ciclo menstrual con la luna porque ambos se dividen en 4 fases, nuestra menstruación y nuestro cuerpo se ven afectados por la fase lunar en la que se encuentren. Además la luna tarda alrededor de 28,5 días en orbitar la tierra, misma duración del ciclo menstrual.
Por otro lado la palabra “menstruación” viene de las palabras griega y latina que significan mes (mensis) y luna (mene).
Fases de nuestra luna
La influencia de la luna en nuestra menstruación: la Luna influye en el estado de ánimo de las mujeres, hay una especial conexión entre el cuerpo astral e interno vaginal.
La Luna es lo suficientemente poderosa como para influir en el comportamiento de la marea, de las profundidades del mar y la cosecha, y en la vida de los seres humanos al estar compuesto mayoritariamente de agua en constante movimiento, quiénes somos capaces de crear vida.
Hay una conexión importante entre las fases de la Luna y la fluctuación de los cuatro neurotransmisores del cuerpo humano (acetilcolina, serotonina, dopamina y norepinefrina o noradrenalina). El cuatro es un número importante: estaciones del año, fases lunares, cuartos de hora, elementos básicos del planeta, fases de la respiración y, sí, el ciclo menstrual.
Esto quiere decir que el ciclo menstrual se encuentra ligado a los ciclos emocionales, los cuales, a su vez, están ligados a la luna. En sus palabras, “En la tierra hay brotes de agua en la tierra, ríos y océanos. En los seres humanos hay canales y meridianos.
Todos ellos con influencia mutua.” La frecuencia de la Luna influye en el control de las emociones, sentimientos y pensamientos, y en las cuatro fases del ciclo menstrual, funcionan como un reloj interno, cuando uno se ha estado observando y estudiando.
1.- Luna nueva:
(arquetipo de “La Bruja”) ❄️ El ciclo de la #siembra, para enfocar una visión. (Menstruación-Luna Nueva-Invierno). Fase menstrual: comienza con el primer día del sangrado da comienzo a un nuevo ciclo lunar, momento de “muerte” y de introspección, se cierra un ciclo momento de liberación, para dar la bienvenida a lo nuevo. Podemos contactar con el lado oscuro y receptivo. Tenemos el don de morir y renacer cada mes. El ideal es poder descansar, soñar y meditar.
Aumenta los niveles de acetilcolina, las emociones se vuelven más intensas y somos más proclives a buscar actividades grupales. Somos más receptivas a lo emocional pero con la energía suficiente para iniciar nuevos proyectos, sembrar plantas, plantear nuevas ideas e intenciones para aprovechar la energía ascendente.
Es una etapa se relaciona con las emociones y sensaciones asociadas con la fase de la menstruación. Ritual: rituales de descarga, cortar, finalizar, olvidar, purificar o proteger.
2.- Luna creciente:
(arquetipo de la “La Virgen”) 🌺 El ciclo de la #maduración, para aterrizar esa visión. (Pre Ovulación-Luna Creciente-Primavera). Fase folicular: se produce el crecimiento de los folículos ováricos; cada folículo contiene un óvulo, la luna se va haciendo visible en el cielo, proceso de preparación de nuestro cuerpo para gestar un óvulo, etapa dinámica y radiante, la mujer o fecunda o se libera de su ciclo procreativo y se centra en su ser, su “yo”.
Mayor confianza y socialización, etapa del ciclo donde la mujer puede centrarse más en su trabajo. La sexualidad en esta etapa suele ser fresca.
El cuerpo incrementa los niveles de serotonina. Es una etapa en que el cuerpo posee mucha energía, concentración mental y creatividad. Se trata de una fase para aprovechar la lucidez de la serotonina para regular el estado de ánimo y producir en áreas del trabajo y cultivo personal. Ritual: como es un momento de fecundidad, es perfecto para trabajar en nuestro bienestar.
3.- Luna llena:
(arquetipo de “La Madre”) 🌿 El ciclo de la #cosecha, para recoger y celebrar los logros. (Ovulación-Luna Llena-Verano). Ovulación: momento en el que se rompe un folículo ovárico y se libera un ovocito, este ovocito se dirige a la trompa de Falopio. En donde va a esperar entre 12 y 48 horas para ser fecundado, de lo contrario empezará a desintegrarse.
Momento en que la luna, la tierra y el sol se encuentran casi alineados perfectamente, por eso una cara de la luna es completamente visible desde la tierra, por eso se le asocia al momento en que el ovocito llega a la trompa de Falopio al alinearse para la fecundación. En esta fase influyen los niveles de dopamina.
Durante esta fase, nos podemos sentir distraídas, con antojos y ganas de sentir placer, reconocimiento, recompensa, necesidad de cercanía emocional. Esta fase rica en dopamina se relaciona muchísimo con los síntomas asociados con la fase de la ovulación.
No por nada nos sorprende que durante esta “ventana de la fertilidad”, estemos buscando actividades más placenteras (con fines reproductivos) de autocuidado. La energía estará más en consonancia con el cuidado de otros, con la maternidad, necesidad de “alimentar” proyectos e ideas.
La sexualidad de la mujer en esta etapa suele manifestarse como una experiencia de amor profundo y el deseo de compartir. Ritual: es la fase con más influencia en la naturaleza es el mejor momento para los rituales de fertilidad.
4.- Luna menguante:
(arquetipo de “La Hechicera”) 🍁 El ciclo de la #recapitulación, para asentar lo experimentado y prepararse para una nueva siembra. (Pre Menstruación-Luna Menguante-Otoño).
Fase lútea
Cuando no ocurre la fecundación, se interrumpe el proceso de preparación con el desprendimiento del endometrio, da paso a la menstruación.
Fase final del ciclo
Solo se ve iluminado el lado izquierdo de la luna. Por eso se relaciona con la fase lútea en la que se da paso a un nuevo ciclo menstrual.
El óvulo ya ha sido liberado y no ha sido fecundado.
Comienza entonces en las mujeres una necesidad de profundizar en el lado más interno de su ser. Esta es una etapa de gran creatividad, donde se puede aprovechar la energía que la mujer acumula cada mes para crear una nueva vida. Esto para hacer arte o explorar otros tipos de expresión creativa.
Suele disminuir su capacidad de concentración y su tolerancia ante lo mundano, pero crece su intuición y su capacidad para soñar. Se suman dos energías, el efecto del no fecundar y la idea de que se avecina el nuevo ciclo y el sangrado.
Hay una resistencia y ahí radica el sentir “síntomas” antes de en vez de aceptarlo como parte natural del proceso. Sentimos movimientos de nuestras “aguas”, hinchazón, dolores, irritabilidad, emocionalidad. Los niveles de noradrenalina suben causando un estado defensivo de queremos proteger de manera intrínseca.
Se trata de una época de mucho análisis, reflexión y cuidado. Ritual: es perfecta para rituales de liberación, superación, para dejar de lado ataduras o viejos patrones.
Si quieres conversar y profundizar en el conocimiento de tu ciclo agendate aquí, durante noviembre días viernes a las 18:30 horas.
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