Prana : Energía vital

Prana : Energía vital

Prana : Energía vital


El Prana es la “energía vital”, se refiere a la energía orgánica que componen las cadenas del cuerpo sutil (lo no físico) fuerza vital, intelecto, mente y ego.

Cuando meditas o practicas yoga te dispones a incorporar el Prana que viaja y se expanda en los centros de energía distribuidos a lo largo de la columna vertebral (chakras)

Al respirar toda la fuerza vital de toda la creación se sintoniza puedes sentir la tierra; la luz del sol que ilumina, la naturaleza, las rocas , el viento, las aguas en sus diferentes formas la materia y las células.

En entornos naturales y silvestres no intervenidos existe niveles de Prana superiores en conexión con la fuente de la vida , muy diferente a los que podemos percibir en las ciudades o entornos muy invadidos de urbanización y contaminación, por esto también la conexión en un entorno silvestre natural es más directa y ocurre la dificultad de conectar, conectarse y conectarnos en ambientes con niveles de Prana más bajos. Al menos así lo percibo muy fuertemente. 


El Prana al interior del cuerpo

El Prana no está solo fuera sino que existe en conexión con la conciencia que habita dentro del cuerpo, y también es la base de todas las creaciones. La respiración consciente ayuda a calmar la mente, para que nuestros pensamientos puedan entrar en armonía con la intuición.

Al regular el prana, regulamos nuestras mentes, porque los dos van juntos siempre. Si se controla una, la otra también se controla automáticamente

El prana nos llena de vitalidad e inmunidad, enriquece la sangre con mucha vida al oxigenarse además la sangre se hace más líquida y fluye mejor esto permite conectar cada parte y hacer que el cuerpo y la mente sean más flexibles. Así cada célula vibra con nueva vida. La energía vital mejora los canales energéticos aportando al sistema digestivo y logrando una buena salud. 

Sin el Prana, la vida en el planeta no sería posible, todos vivimos en él, es quien mueve la luz. Está en toda la naturaleza y su vibración es divina.

Cada vez que inspiramos absorbemos Prana y lo distribuimos por los diversos órganos del cuerpo sutil. El Prana forma las líneas de flujo de energía y de su circulación, en estos principios se basa el Yoga.


El Prana en nuestro cuerpo

En el cuerpo actúan cinco fuerzas, cada una con su propia función, son llamadas Vayus (vientos):

  • Prana: fuerza vital ascendente asentada en el corazón, gobernando la inhalación y la región del pecho, responsable de la respiración.
  • Apana: fuerza vital descendente, asentada en el ano, gobierna la exhalación, el abdomen bajo y el proceso de eliminación.
  • Vyana: es la fuerza vital que lo impregna todo, gobierna el sistema circulatorio y la distribución de prana en el cuerpo.
  • Udana: es la energía vital que se alza hacia arriba asentada en la región de la garganta, que gobierna el lenguaje y el tragar.
  • Samana: es la fuerza vital medial, asentada en la región del ombligo, que gobierna el área central del cuerpo y la digestión.

Cultivar el Prana

La energía vital tiene la inteligencia de enviar información a todo el cuerpo, se puede ejercitar con yoga, meditación y prácticas respiratorias conscientes que pueden nutrir nuestro espíritu, ayudar a transformarnos y sanar dolores.

Esta energía puede acumularse en los centros nerviosos y energéticos (chakras) para después ser llevada en coherencia y desde el amor y compasión a la vida.

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